Fiesta en los mercados, miseria en la vida real

Las consecuencias brutales del ajuste ya se debaten hasta en círculos de la oposición Milei friendly y la consultora estrella de la City tiene en rojo a casi todas las actividades productivas. La recesión industrial se ve en cifras de la metalurgia, que tuvo el peor septiembre en siete años; y el consumo, que batirá nuevos récord de caída.
La fiesta de los mercados, una constante en las últimas semanas, no sólo es hija del ajuste a la economía real, sino que es la contracara de una depresión económica que parece perpetuarse. A contramano de lo que vende el Gobierno, los datos de actividad en el mes de septiembre y lo que va de octubre reportan una prolongación de la recesión, sin fecha cierta de salida. La industria metalúrgica, el consumo masivo, la construcción, los viajes de fin de semana largo y hasta la producción de autos reportan cifras muy negativas, que empeoran con una caída aún sostenida del empleo del 2 por ciento y un freno en la recuperación de los salarios que se dio, según el SIPA, en el mes de agosto.